Excelente reputación, credibilidad, sentido de pertenencia de sus públicos, ambientes favorables laborales y para negociaciones, acercamientos asertivos con sus públicos, mayor comprensión de las necesidades, expectativas y realidades de sus públicos, relaciones duraderas, creación de comunidades, comunicación asertiva comprendiendo el entorno social, lobby con el Gobierno, con el sector público y con el sector privado, gestión de prensa y otros medios de comunicación.

Todo lo anterior fortalece y acompaña las estrategias de publicidad y mercadeo, para el posicionamiento de la marca, generando interés en sus productos y sus servicios de forma constante a través del tiempo, es decir, fideliza a sus públicos.

Es sumamente importante que su cultura organizacional sea consistente con lo que desea comunicar externamente, la única forma de lograrlo es desde las Relaciones Públicas. Piense en una fotografía editada, los filtros son temporales cuando no se trabaja desde y con la fuente.

En Lapislázuli Comunicación acostumbramos un primer acercamiento con el posible cliente, sin costo económico para este, para conocer de forma general la situación actual de su organización, marca, proyecto… y recomendar, en términos generales, un plan estratégico a seguir. Un segundo paso consiste en la cotización formal del servicio, este puede ser total para generar y aplicar la estrategia, campaña y sus derivados o consultoría pura, acá se genera la estrategia y se instruye a los directivos y administrativos sobre como ejecutarla.

El plan comunicacional está estrechamente relacionado con los objetivos de la organización, así como el comportamiento del mercado. Si puntualizamos en comunicación interna, la observación del ambiente y cultura laboral también debe ser constante, identificar oportunamente alguna situación de alerta, evita llegar a un escenario de crisis, por lo que la revisión del plan comunicacional debería permanecer activa en la agenda ejecutiva.

Absolutamente todas las organizaciones, incluso las personas de forma individual la necesitan, más aún si algún sector de la sociedad las identifica como figuras públicas o influenciadores.

Porque el fuerte de las relaciones públicas es la interacción con los públicos, y los “eventos” se planifican pensando en el público, la pericia del relacionista público logra que el presupuesto utilizado en la generación del evento sea una inversión, no un gasto, es decir, se recupere desde la gestión de marca, además, el conocimiento global del entorno, público participante, permite que el “evento” pase de ser una actividad a ser una experiencia que genere encadenamientos.

El profesional en Relaciones Públicas es un estratega, no es solo un “event planner”.

Si, todas las actividades organizacionales, corporativas, empresariales tanto en escenario físicos como virtuales. Trabajamos con aliados en áreas como iluminación, audio, video, catering services, entre otros, así como podemos enlazarnos con el equipo interdisciplinario del cliente, para gestar cada uno de los productos, en todo momento Lapislázuli Comunicación gestiona la logística y dirección general.